Historias sin pies ni cabeza: La bruja.

Ella me escuchó y a los que me acompañaban,
me trasmitió mensajes y me contó cosas,
que a pesar de que ya sabía, no entendía.

Ella me contó de cómo morí quemado en casa una vez,
y que por éso ahora le temo al fuego;
pero me hizo sacarme de la escena y moldear el recuerdo
--para liberarme.

Confirmó mis sopechas de
que en el pasado hice algo mal, fui algo malo;
pero pero me aseguró que mi alma está limpia ahora,
que estoy perdonado, por casi todos--menos yo mismo,
y aún debo hacerlo, para curar.

Me contó de ésa vez que perdí  a Arianna y lamenté tanto haberlo hecho
que el miedo de que vuelva a pasar me ata hasta hoy en día,
pero me alivió diciendo que no se repetirá.

Me explicó por qué Julia hizo lo que hizo:
estaba triste y su alma estaba compartida en una lucha con alguien,
vil y desesperado que la quería hundir en sus vicios,
pero su padre portador de luz la abrazó y volaron juntos.

El cuarto se volvió frío y oscuro, el aire intenso
e irónicamente yo me iluminé--fui una llama,
ardiente, titilante y poderosa,
creciente contra la oscuridad que nos quería encerrar.

Me aclaró el por qué de ésa melancolía repentina y sin razón:
Clara me había acompañado siempre,
pero jalaba con ella sus penas pasadas,
de las que se tenía que liberar para volver a mí.
Mientras la espero, será mejor que cuide mi corazón.

"a veces un amigo puede ser más amor que aquel al que admiras"

Y lo desnivelado y el dolor de espalda
que un hombre desconocido me inculcó,
que debo superar al recordar que mis padres
ambos  juntos están ahí de soporte.

Ella dejó que mi cuerpo hablara,
que mi aura recordara. Yo volé... 
mientras la energía tomaba diferentes formas y colores
concentrándose al final en una piedra, verde,
sólida y mundana para los deseos humanos.

Ella se sorprendió de lo poco claro que era ver mi futuro,
vió libertad, movimiento, crecimiento y cambio.
Ella vió la fortaleza que cargo desde un nacimiento difícil,
y mi capacidad de alegrar a los demás, con quienes fortaleció lazos.

La bruja me recordó que yo también estoy aquí,
que no debo olvidar que no importa a dónde vaya
el objetivo es buscar crecer y ser feliz.
El alma se enriquece con cada lección, 
y ésa debe ser la única motivación.



is.

Comentarios

  1. ¿Qué hacer con las memorias que cargamos, con las otras y los otros que fuimos? La mayoría del tiempo intento no mirar hacia atrás. Tengo un jardín florido frente a mí y es suficiente. No necesito, no podría con el bosque que susurra a mis espaldas. Y sin embargo, solo a veces, me pregunto qué resortes misteriosos se me mueven por dentro...

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